13 de abril de 2021
Kevin Molina
831 palabras; 4 minutos de lectura
El COVID-19 nos dejó historias desoladoras, un sinnúmero de pérdidas humanas, fracasos económicos, también diferentes visiones, innovaciones y más. Estos hechos no fueron exclusivos de un país, el impacto fue mundial. Entonces, ¿qué factura nos deja la pandemia?
Desde la dimensión económica, el COVID-19 deja a muchos países –principalmente economías emergentes– en graves penurias, con grandes segmentos de la población en condición de hacinamiento y vulnerabilidad, y cuantiosas pérdidas que se han transformado en altos índices de pobreza y en decrecimiento del Producto Interno Bruto (PIB).
Impacto en el PIB de la región: ¿quién decreció más?
El PIB es una cifra en dólares que cuantifica la producción de riqueza de un país en un año. Es como si una familia cuantificara todos sus ingresos en un año y luego, al compararlos con el año anterior, observara si estos han crecido o disminuido.
A inicios de la pandemia, el Banco Mundial proyectaba una caída del 4.6% en el PIB de la región -América Latina y Caribe (ALC)- para el año 2020.
La cifra se quedó corta.
Posteriormente, la CEPAL (Comisión Económica para América Latina y el Caribe) estimaba que el desplome del PIB para el cierre del año 2020 sería de 9.1%.
Esta cifra sugiere que se trata de la peor caída en 120 años –desde que se tienen registros de datos– y significa un retroceso de 10 años, tomando en cuenta el nivel del PIB per cápita del año 2010. Imagine por un momento que usted vuelve a ganar lo mismo que hace… diez años. ¡Pues así estamos!
Si bien es cierto, toda la región sufrió el golpe económico a causa del virus, no todos los países decrecieron en la misma magnitud: Perú (-12.9%), Panamá (-11%) y Argentina (-10.5%) son los tres países que más decrecieron el América Latina. Fuera de ese top 3 queda Venezuela, que por amplio margen supera en decrecimiento a las naciones anteriormente mencionadas, aunque sin precisiones posibles debido a problemas en el acceso y veracidad de los datos.
La pandemia golpeó con fuerza la economía de todos los países, pero desde antes de la misma ya nueve países –de un total de 20 de América Latina– estaban en números rojos y ocho en una franca desaceleración económica.
Hay dos razones principales para la recesión prepandémica: la crisis de China que conllevó a un bajón de la demanda externa y los estallidos sociales que se dieron con más fuerza en Chile, Colombia y Ecuador.
Ecuador en la pandemia
¡El COVID-19 nos cogió de bajada! Desde el tercer trimestre del año 2017, Ecuador, viene en desaceleración económica, las causas de aquello se explican en el giro de la política económica, medidas de austeridad, rebeliones sociales internas, shocks económicos externos, entre otros.
Llegada la pandemia, se agravó esta condición. Ecuador, al igual que México, está entre las cinco economías que más decreció en el año 2020 con -9%, según la estimación de la CEPAL.
Las medidas de confinamiento debido a la pandemia hicieron que la economía y el consumo caminen a paso de tortuga, por ello, se registró una rotunda caída de la demanda agregada.
Comparando cifras respecto a los mismos períodos del año 2019, en el segundo trimestre de 2020 se registró una caída del consumo de los hogares del 12% y del gobierno 10,5%.
Además, entre enero y septiembre también cayeron las exportaciones petroleras (-44%). Durísimo golpe, considerando nuestra dependencia a la venta de crudo.
Estimaciones de recuperación
Todos los organismos especializados coinciden que la recuperación económica de los países de ALC, a raíz de los estragos de la pandemia, aún es incierta.
Según las estimaciones de la CEPAL, ningún país de la región consiguió evitar la recesión en el pasado año. Sin embargo, la mayoría de estas naciones reanudarían su crecimiento este año.
Para 2021, se espera que la tasa de crecimiento promedio en la región sea de 3,7%, según estimaciones de la propia CEPAL, siendo Perú y Argentina algunos de los países con mejores perspectivas de crecimiento: 9% y 5% respectivamente.
Para Ecuador la estimación de la CEPAL es de apenas 1% de crecimiento.
Lo que podemos esperar de Ecuador
Según la propia CEPAL, la recuperación de la economía ecuatoriana será posible solo con un plan agresivo de estímulo a la demanda interna, un programa de control de la pandemia con pruebas y vacunación masiva, reinicio paulatino de las actividades económicas y asistencia social a grupos vulnerables.
Sepamos que también hay factores de incertidumbre: condiciones externas de cómo va evolucionando la pandemia, el abastecimiento de vacunas por parte de los proveedores y una eventual nueva caída de los precios del petróleo y las materias primas.
De la misma forma como estamos tardando -y tardaremos aun más- en volver a la normalidad de antes de no usar mascarilla, ir a clases presenciales y total libertad para eventos masivos, el PIB tardará algunos años en volver a niveles previos a la pandemia.
Es la factura de la pandemia. Y nos está saliendo muy alta.
FUENTES
https://estadisticas.cepal.org/cepalstat/tabulador/ConsultaIntegradaProc_HTML.asp
https://www.cepal.org/sites/default/files/publication/files/46501/S2000990_es.pdf
https://www.bbc.com/mundo/noticias-53438543
https://www.bbc.com/mundo/noticias-55418674
https://es.statista.com/grafico/21483/crecimiento-del-pib-despues-del-coronavirus-en-latinoamerica/